El pensamiento moderno del iluminismo daba por hecho, que gracias a la industria, los avances científicos, técnicos etc., proporcionarían al individuo felicidad, porque su forma de vivir mejoraria en todos los aspectos, pero que alejados estaban de la realidad, pues esa felicidad estaba destinada solo para algunos grupos de la sociedad al igual que hoy en día.
Hoy podemos constatar que no todos los grupos sociales tienen acceso a los beneficios de nuestra modernidad. En nuestras grandes ciudades encontramos "apabullantes" estilos de vida, entre los grupos de poder adquisitivo, en contraste con los grandes cinturones de miseria que existen en nuestra sociedad
Hoy podemos constatar que no todos los grupos sociales tienen acceso a los beneficios de nuestra modernidad. En nuestras grandes ciudades encontramos "apabullantes" estilos de vida, entre los grupos de poder adquisitivo, en contraste con los grandes cinturones de miseria que existen en nuestra sociedad
Olivia Orozco
Hola Olivia, gracias por el post. La racionalidad instrumental hizo tener grandes expectativas sociales para alcanzar la llamada felicidad, pero ¿para quiénes? La felicidad es un invento de la burguesía del siglo XIX y quien iba a regir esa felicidad era el Estado ¡sorpresa! Seguimos creyendo que la felicidad la proporciona el atesorar mercancías, una tras otra. En la pobreza hay sus niveles, como en la clase media, no son un todo homogéneo y nos sorprendería ver a indígenas o albañiles con celulares más sofisticados que un clasemediero. El mundo no está dividido en pobres y ricos, aunuqe así lo parezca, hay que matizar esos grandes bloques. Bien por la reflexión.
ResponderEliminarGraciela